La Lucha continúa.

En Piedra del Águila, un rinconcito a unos doscientos para abajo de Neuquén, donde las águilas se extinguieron, las piedras como prueba de la inmensidad se alzan al lado de un pueblo que tranquilo, pero un tanto olvidado, respira los aires del sur y viaja más al norte a manifestarse. Carlos Fuentealba es un presente, se nota. Así como los obreros de la FASINPAT (Fábrica sin patrones) día a día salen más y más adelante, ahora con un gran despliegue artístico/social sin siquiera un solo policía haciendo la seguridad; los maestros reclaman sus derechos y su compañero perdido, asesinado por la misma policía que NO acudió al recital de Ska-p en la Cerámica Zanón, donde el control obrero y la resistencia se sintieron más que nunca. Una provincia que como tantas otras merece un gobierno mejor. El MPN (Movimiento popular neuquino) tiene gente cuya cara es tan dura que pasa por las casas de la gente a pedir el voto a Jorge Sobisch, incluso por los hogares de maestros que ya no soportan el gorilaje de este movimiento que los condena desde el año 1962 y que ha desaparecido compañeros en las revueltas.
He podido rescatar un gobierno asqueroso, una publicidad repugnante, y en medio de todo, la lucha de un pueblo que quiere salir del estancamiento y la barbarie; tanto el de Neuquén como el del pequeño pueblo que ahora está expropiando lotes por medio de una toma a un gran terrateniente, para así poder promover el acceso a la vivienda.

La muerte de nuestro ex y futuro presidente Nestor Kirschner tocó a todo el pueblo argentino por igual, sabemos que a cierta escoria no, pero también sabemos que poco nos importa la opinión de la oligarquía y sus seguidores. Un lider nato tanto de nuestro país como de Latinoamérica, al hacerse la cara visible al frente de Unasur, fué el que nos dejó la semana pasada. Y pensar que por un momento sentí temor por el desmoronamiento de nuestros proyectos, así como le pasó al pueblo de Nicaragua con el injusto asesinato de Augusto Cesar Sandino que frenó la revolución por algunas decadas. Pero así como se formó el FSLN (Frente Sandinista de Liberación Nacional) para seguir con la lucha los argentinos, llenos de rabia gritamos entonces: "FUERZA PRESIDENTA", los que queremos el cambio estamos acá, dispuestos a levantarnos cuando sea necesario.

Luchin